Muere Felix Baumgartner, el hombre que saltó desde el espacio, a los 56 años
El pionero de los deportes extremos ha muerto en un accidente aéreo ocurrido en Italia. Fue el primer humano en romper la barrera del sonido en caída libre

Felix Baumgartner.
El paracaidista austríaco Felix Baumgartner ha fallecido este jueves a los 56 años a causa de un fatal accidente con su parapente motorizado en la localidad italiana de Porto Sant'Elpidio. El deportista extremo, mundialmente conocido por su histórico salto estratosférico de 2012, perdió el control de su aeronave y se precipitó contra la piscina de un complejo hotelero, falleciendo en el acto según confirmaron los equipos de emergencia desplazados al lugar del siniestro.
Según ha podido constatar 'Sky Sport Austria' mediante información de la Austria Presse Agentur (APA), que cita al cuerpo de bomberos presente en el rescate, Baumgartner sufrió una repentina indisposición mientras pilotaba el parapente motorizado, lo que le hizo perder el control del aparato antes de estrellarse contra la zona de baño del establecimiento. "Falleció en el acto, según informaron los equipos de rescate", añade el medio deportivo austríaco en su crónica de los hechos.
El impacto provocó, además, heridas a una empleada del hotel que se encontraba en las inmediaciones. La mujer, que recibió el golpe de un fragmento desprendido del vehículo durante el choque, fue atendida inicialmente en el lugar y posteriormente trasladada a un centro hospitalario con lesiones en el cuello. Los servicios de emergencia señalaron que, pese a la gravedad del accidente, podría haber sido mucho peor dado que en el momento del siniestro había numerosas personas, incluidos niños, en la zona de la piscina.
Detalles del trágico accidente en Porto Sant'Elpidio
El suceso tuvo lugar alrededor de las 16:00 horas (hora local) en el complejo vacacional Le Mimose, un recinto de 30.000 metros cuadrados situado a apenas dos kilómetros del centro urbano de Porto Sant'Elpidio, según detalló el diario italiano 'Corriere della Sera'. La pareja sentimental de Baumgartner, que se encontraba con él en la zona, fue informada inmediatamente del fallecimiento.
Tras el accidente, acudieron al lugar los 'carabinieri', bomberos y personal de la Cruz Roja local, que acordonaron rápidamente la zona alrededor de la piscina donde se produjo el impacto. Según los informes preliminares, el parapente se estrelló contra una estructura de madera adyacente a la zona de baño, lo que pudo contribuir a la gravedad del impacto.
Las autoridades italianas han abierto una investigación para esclarecer las causas exactas del accidente, aunque las primeras hipótesis apuntan a un problema médico repentino que habría provocado que el experimentado paracaidista perdiera el control de su aeronave en pleno vuelo.
Un legado histórico en el mundo del paracaidismo extremo
Felix Baumgartner había pasado a la historia de la aviación y los deportes extremos el 14 de octubre de 2012, cuando con 43 años protagonizó el famoso salto Red Bull Stratos, una hazaña que captó la atención mundial. Aquel día, el austríaco ascendió en una cápsula amarrada a un enorme globo de helio hasta los 38.964 metros de altura sobre el estado de Nuevo México (EE.UU.), para después lanzarse al vacío y convertirse en el primer ser humano en superar la barrera del sonido en caída libre.
Aquella proeza no solo le permitió romper la barrera sónica, sino que también estableció el récord de vuelo en globo tripulado a mayor altura, superando los 37 kilómetros. Su ascensión a la estratosfera duró más de 2 horas y media, mientras que su descenso se completó en 4 minutos y 19 segundos. Durante esta caída histórica, Baumgartner adoptó una posición específica con la cabeza por delante para evitar posibles pérdidas de conocimiento o hemorragias cerebrales debido a las extremas condiciones físicas.
Con este salto, superó ampliamente la marca establecida por Joe Kittinger, un militar estadounidense que en 1960 se había arrojado desde 31.333 metros de altura mientras servía en las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos. Kittinger, que falleció en 2022 a los 94 años, formó parte del equipo asesor de Baumgartner para su salto estratosférico.
Reconocimiento internacional y carrera posterior
El impacto mediático y deportivo de su hazaña le valió numerosos reconocimientos, entre ellos el premio Laureus al Mejor Deportista Extremo Internacional en marzo de 2013. Un año después, en 2014, publicó su autobiografía titulada "Mi vida en caída libre", editada en España por Editorial Planeta, donde narraba los entresijos y la cara menos conocida de su histórico salto desde la estratosfera.
Tras aquella gesta, Baumgartner había continuado vinculado al mundo de los deportes de riesgo y las actividades aéreas, manteniendo su pasión por el vuelo y el paracaidismo. Su repentino fallecimiento a los 56 años ha causado conmoción en el mundo del deporte extremo, donde era considerado una leyenda viva y un pionero que había ampliado los límites de lo humanamente posible.
¿Quién era Felix Baumgartner?
Nacido el 20 de abril de 1969 en Salzburgo (Austria), Felix Baumgartner comenzó su carrera en el paracaidismo a los 16 años, desarrollando posteriormente una trayectoria profesional en la que acumuló más de 2.600 saltos. Antes de su histórico salto estratosférico, ya había conseguido notoriedad por atravesar el Canal de la Mancha con un ala de fibra de carbono especialmente diseñada y por saltar desde algunos de los edificios y monumentos más emblemáticos del mundo.
A lo largo de su carrera, estableció varios récords mundiales y se convirtió en uno de los rostros más reconocibles de los deportes extremos a nivel global. Su meticulosa preparación para el proyecto Red Bull Stratos, que incluyó cinco años de entrenamiento y pruebas, demostró su enfoque profesional y disciplinado hacia actividades de alto riesgo.
Durante los últimos años había mantenido un perfil público más discreto, aunque seguía practicando diversas modalidades de vuelo y paracaidismo. Su legado perdurará como uno de los grandes pioneros en la historia de los deportes extremos y las hazañas humanas, habiendo marcado un hito que combinó el avance científico con la superación de los límites físicos y psicológicos.
¿Qué impacto tuvo el salto estratosférico de Baumgartner?
El proyecto Red Bull Stratos no fue solo una hazaña deportiva, sino también un experimento científico con importantes aportaciones para la investigación aeroespacial y médica. Los datos recopilados durante el salto proporcionaron información valiosa sobre la respuesta del cuerpo humano en condiciones extremas similares a las que podrían experimentar los astronautas en caso de emergencia.
La retransmisión del salto se convirtió en un fenómeno mediático global, con más de 8 millones de personas siguiendo el evento en directo a través de YouTube, estableciendo en su momento un récord de audiencia para la plataforma. Este impacto mediático contribuyó a popularizar los deportes extremos y a consolidar un nuevo modelo de patrocinio deportivo vinculado a hazañas de alta visibilidad.