La hostelería afronta el inverno con temor por los altos precios de la energía

El secretario general de la Federación de Hostelería de Lleida, Ramon Solsona, aseguró ayer que los establecimientos afrontan la temporada de invierno “con máxima incertidumbre” por la elevada inflacción y el encarecimiento de la energía eléctrica, pero con la esperanza puesta en una buena temporada de nieve. Solsona recordó la alta ocupación durante el verano, ya que los negocios han registrado ocupaciones máximas de su serie histórica. Concretamente, los campings han acogido a unas 171.000 personas, su mejor registro, mientras que los hoteles casi a 216.000 en julio, su segunda mejor cifra detrás de 2006.

Por lo que respecta a las casas de payés, el presidente de la Confederación Catalana de Agroturismo y Turismo Rural (Concatur), Ferran Puig, indicó que sus asosiciados mantienen las cifras de 2019. Remarcó que, si bien la pandemia ha despertado el interés por las casas rurales, advirtió que hay algunos establecimientos que preferirán no abrir en invierno por el incremento de los costes de energía, ya que “encender la calefacción para un 50% de ocupación no sale a cuenta”.En cuanto a los campings y bungalows, el verano ha servido para recuperar la confianza ya que las ocupaciones han llegado en verano a superar el 90%.