FGC abre la puerta a colaborar con Lladorre para evitar el cierre de la estación de Tavascan

La empresa pública Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) manifestó ayer su disposición a colaborar en la búsqueda de soluciones para asegurar el futuro de la estación de Tavascan. Lo hizo después de que el propietario del complejo, el ayuntamiento de Lladorre, anunciase el cierre indefinido de las pistas de esquí alpino al no poder sufragar el alto coste de mantenerlas en servicio (como avanzó SEGRE ayer).

El presidente de FGC, Carles Ruiz, ha contactado ya con el alcalde, Salvador Tomàs, para concertar una reunión en los próximos días y abordar el futuro de la estación. Este pasa por costosas inversiones en su remonte principal, un telesilla de casi 30 años, y en su máquina pisanieves. “Antes de dar cualquier paso, la decisión es hablar con el alcalde y conocer de primera mano cuál es la situación”, declararon fuentes de la empresa pública.

FGC y la Generalitat se mostraron “determinados a buscar soluciones y ver cómo podemos ayudar a Tavascan y a Lladorre” y recalcaron su apoyo tanto a esta “como al resto de estaciones de esquí”. Esta declaración de intenciones abre una puerta a la esperanza para la economía local de la zona. Se ve directamente afectada por el cierre de la estación, que genera una veintena de empleos directos. 

FGC ya colabora con Tavascan en materia de promoción y con los forfets de temporada del Pallars a través de acuerdos comerciales. En la misma línea, el departamento de Territorio ha financiado gran parte del nuevo sistema de innivación que estrenó Tavascan esta temporada.