Comienza la obra para sacar de Binéfar el tráfico pesado
Una sociedad de tres constructoras inicia los trabajos de la variante norte de la capital literana. El Gobierno de Aragón prevé que esté operativa en 2026
Acceso a Binéfar por la carretera de San Esteban de Llitera. - E.B.D.
Concesionaria Cinca-Litera, la empresa participada por las constructoras Cyopsa-Sisocia, Sarrión Construcciones y Hormigones Grañén, tiene previsto iniciar esta semana los trabajos de construcción de la variante norte de Binéfar, la obra que debería eliminar la circulación de vehículos pesados en tránsito por el casco urbano de la capital literana.
El inicio de las obras estaba previsto para el pasado 10 de marzo, aunque las intensas lluvias de las últimas semanas dejaron el terreno por el que discurre el trazado impracticable para la maquinaria pesada.
Fuentes de la consejería de Fomento del Gobierno de Aragón confirmaron que la empresa ya ha confirmado esa previsión.
Los trabajos comenzarán con el desbroce de toda la plataforma por la que debe discurrir la variante.
Las previsiones iniciales apuntaban a “mediados de mayo de 2026” como fecha de finalizacion de los trabajos, por lo que las cuatro semanas de retraso trasladarían la puesta en servicio como mínimo a comienzos del mes de junio del año que viene. El plazo oficial de ejecución es de 30 meses.
La nueva carretera, de 4,5 km de longitud, tendrá una calzada de diez metros de ancho que unirá la N-240 en la zona oeste de Binéfar con esa misma vía en el polígono El Sosal, en la salida hacia la autovía A-22.
La variante contará con tres rotondas, una para enlazar con la carretera de San Esteban de Llitera, otra para la de Tamarit y una más para el área industrial.
Una vez entre en servicio, las cuatro carreteras autonómicas que confluyen en Binéfar, las dos que van hacia Albalate de Cinca por Esplús y por Binaced, la de San Esteban y la de Tamarit, tendrán conexión con una de las rondas que permitan eludir el paso por el casco urbano y, también, con la N-240 y la A-22, una circunstancia que debería reducir a los trayectos de última milla la circulación de vehículos pesados por la capital literana.
Esa misma asociación de empresas es la concesionaria del llamado “itinerario 7” del Plan Extraordinario de Inversiones en Carreteras de la Red Autonómica Aragonesa, una concesión de 25 años sobre 169 km de vías autonómicas que incluye una partida de 51,64 millones de euros en obras nuevas y otra de 29,69 para conservación.
Por otro lado, el Gobierno de Aragón ha autorizado recientemente una solicitud de Concesionaria Cinca-Litera para dejar sus acciones, valoradas en 8,451 millones de euros, en prenda al Banc Sabadell y a dos fondos de inversión (Swiss Life Loan Fund y ESG Infrastructure Debt) para avalar la financiación de sus actividades en esa zona de la red viaria aragonesa.
La consejería de Fomento supervisará la operación financiera.
