TERRITORIO
Canoas para revitalizar el Segre
Casi 100 embarcaciones y 164 personas bajaron por el río para promocionar el tramo entre Torres y La Granja. El descenso estuvo vigilado por bomberos y una ambulancia y no hubo percances

Participaron 164 personas de todas las edades. - A.T.S.
Casi un centenar de piraguas y 164 personas participaron en la bajada por el Segre que salió de Torres sobre las 9.00 horas pasando por Aitona y Serós, con la posibilidad de llegar al Aiguabarreig con el Cinca en La Granja d'Escarp. Esta es la octava edición de esta actividad lúdico-deportiva con la que los ayuntamientos quieren promocionar este tramo del río y acercarlo tanto a los visitantes como a los vecinos. Según el alcalde de Torres, Axel Curcó, “es algo que tenemos al lado pero para muchos es un enclave desconocido. Es una experiencia abierta a todo el público aunque los menores de 15 años tienen que ir acompañados”.
El precio máximo de la inscripción fue de 30 euros si se facilitaba la piragua, bien individual o triplaza, las palas y los chalecos salvavidas. También el seguro de accidente y la disponibilidad de guías y monitores, un almuerzo a la salida de Torres y la comida en Seròs y la entrada gratuita a las piscinas de esta última población. Podía reducirse en función de los actos a los que se apuntaba cada asistente. El precio mínimo fue de 10 euros. Según Curcó, bomberos de Serós y una ambulancia con personal sanitario fue recorriendo el camino para atender posibles incidencias, aunque no hubo que lamentar ninguna. También se pusieron a disposición de los inscritos autocares que los recogieron y devolvieron a los puntos de salida. Se establecieron dos recorridos, uno desde Torres hasta la Gravera de Seròs, de unos 11,5 kilómetros y una duracion de 2 horas, y otro que se podía alargar hasta La Granja d’Escarp para ver la confluencia de los dos ríos, con una longitud de 20 kilómetros.
La organización recogió 390 euros para la Associació de Familiar i Amics de Nens Oncológic de Catalunya (Afanoc), entidad con la que participa desde que se puso en marcha esta iniciativa que este año llega a su octava edición. Curcó indicó que “lo que pretendemos con el descenso es que los participantes descubran un paisaje increíble pasando por las poblaciones de Torres, Aitona y Seros y, opcionalmente por La Granja que se unió a la experiencia recientemente. Además, se habilitaron diferentes puntos de observación de la flora y la fauna a lo largo del tramo. El trayecto no supone peligro, ya que es plano y sencillo y presenta una dificultad baja para la navegación”, puntualizó. Aseguró que él mismo había tomado parte en varias de las bajadas de años anteriores, pero “es hora de dar paso a los jóvenes que deben valorar su patrimonio natural y darlo a conocer”.