Refuerzan el control en la aduana de Andorra para detectar ‘falsos’ transfronterizos: el gobierno español y el andorrano quieren "poner orden"
El puesto andorrano y el servicio de Inmigración del país vecino intensifican la vigilancia

La policía de Andorra ha intensificado los controles en la frontera de la Farga de Moles. - C.SANS
El problema de los falsos transfronterizos continúa y el gobierno andorrano ya ha empezado a mover ficha ante las presiones del español, que exige una solución rápida. Los agentes de la aduana andorrana han recibido órdenes de intensificar los controles sobre los que cruzan la frontera, mientras que el servicio de Inmigración del país vecino también deberá reforzar la vigilancia sobre las solicitudes de permisos de trabajo transfronterizo, comprobando que las personas extracomunitarias disponen del permiso para residir en España, y no solo de un empadronamiento (y un certificado de penales), como pasaba hasta ahora. El objetivo es garantizar que toda la documentación esté en regla y evitar prácticas irregulares. Así, desde hace algunas semanas la aduana de Andorra vigila con más atención los vehículos que repiten patrones repetitivos, como por ejemplo entrar al país cada día a la misma hora.
El gobierno español y el andorrano coinciden en la voluntad de poner orden para que no se repitan los casos de los falsos transfronterizos. El delegado del Gobierno español en Catalunya, Carlos Prieto, apuesta “por el diálogo institucional” entre los ministerios de Exteriores de los dos países “para evitar irregularidades laborales en la frontera”. Defiende que hay que garantizar que estos trabajadores vivan en el Principat si el permiso de trabajo que obtienen así lo determina.
Prieto no atribuye responsabilidades a los gobiernos implicados sinó que culpa de las empresas que contratan a estos trabajadores para hacer negocio. Asimismo apunta a la existencia de un sistema organizado que actúa sobre personas vulnerables, muchas veces sin ser conocedoras de su verdadero estatus legal. “Debemos combatir la mala praxis empresarial”, añade.
Asimismo, el Principat recibirá un nuevo grupo de peruanos este mes de octubre sin trabajo asegurado. Lo alertó la semana pasada la Asociación de Residentes Peruanos en Andorra, que teme que llegarán “a la aventura” con la voluntad de encontrar trabajo en sectores de hostelería y restauración y con la problemática añadida de la crisis de la vivienda. La dificultad de encontrar piso lleva a más de 100 peruanos a vivir en La Seu y trabajar en Andorra, pese a no tener permiso de residencia en España, según la entidad.
Niegan la entrada a 230 temporeros por no tener billete de vuelta
Las empresas andorranas han rechazado la llegada de más de 230 temporeros por no tener el billete de vuelta al país de origen o residencia. Lo dijo el presidente de la asociación de argentinos del Principat, Marcelo Ponce. La exigencia de acreditar el billete de salida del país en dirección al país de origen o residencia es uno de los requisitos que ha fijado el gobierno andorrano recientemente para regular la llegada de trabajadores a Andorra.
Otra de las medidas para los temporeros que quieran venir a hacer la campaña de invierno es que la vivienda “debe de estar a nombre del trabajador de manera obligatoria”, impidiendo así la práctica habitual de algunos de ellos que vivían de forma masiva en apartamentos pequeños. La entidad alerta también sobre las publicaciones anónimas de ofertas de alquiler o de trabajo que “son sospechosas de fraude y recomendamos no hacer caso de ellas”.