Una ola de seis agresiones sexuales dispara las alarmas en una comarca aragonesa
Acumula más de 40 casos de violencia machista en los primeros 9 meses del año

Sede de los Servicios Sociales de la Llitera en Tamarit. - E.B.D.
La violencia sexual se ha disparado en los meses de verano en la comarca de la Llitera, cuyos Servicios Sociales han recibido este verano seis partes sobre agresiones sexuales procedentes de la línea 900 del IAM (Instituto Aragonés de la Mujer), que deriva a sus zonas de atención las emergencias por ataques a mujeres.
“Este tipo de denuncias ha crecido mucho. Estamos trabajando mucho la formación de los profesionales para hacerle frente y preparamos una campaña de difusión de información”, explica Berta Guillén, directora del Centro de Servicios Sociales de la Comarca de la Llitera. “Se están poniendo todos los medios para hacer frente a esta situación”, anota la presidenta de la Comarca, Tania Solans.
El volumen de partes por agresiones sexuales en la zona, que multiplica por seis los datos del año pasado, arroja una tasa de criminalidad más elevada que la de sus entornos geográficos: se sitúa en 31,4 por cada 100.000 habitantes cuando, según los datos del Balance de Criminalidad del ministerio del Interior y del INE (Instituto Nacional de Estadística), en Aragón se queda en el 6,3, en el conjunto de la provincia de Huesca se eleva a 17,9 y en las áreas rurales de esta última sube al 21,8. La prevalencia de la delincuencia sexual en su conjunto, que incluye los antiguos abusos y violaciones, se eleva a 32,1 casos por cada 100.000 habitantes en el primero de esos ámbitos y a 25,3 en los dos últimos. En la Llitera se trataba de accesos carnales o de tentativas de estos.
No hay un perfil definido entre los agresores, todos ellos identificados por la Guardia Civil y puestos a disposición judicial, aunque predominan rasgos como tratarse personas jóvenes y en alguna ocasión el de haber sido parejas de las víctimas.
A este repunte de las agresiones sexuales se le suma un alto número de ataques machistas, que supera los 40 en los primeros nueve meses de este año. La prevalencia es de casi 215 por cada 100.000 habitantes, elevada aunque, al mismo tiempo, alejada de las del conjunto del Estado (407) y de Aragón (382).
Los datos, similares a los del año pasado, se refieren, también en este caso, a los partes remitidos desde la línea 900 del IAM. “No todos los partes llegan a transformarse en denuncias” ante la Guardia Civil o el juzgado, anota Guillén, quien señala que los Servicios Sociales efectúan un acompañamiento a las víctimas, a las que se les asigna un profesional de referencia.
“No hay un perfil claro de los agresores ni por edad, ni por nacionalidad ni por estrato socioeconómico”, señala Guillén, quien apunta a la carencia de autonomía económica de las víctimas como el principal factor disuasorio, por encima del cultural aunque con frecuencia vinculado a este, para las potenciales denunciantes. “Intentamos dotarlas de esa autonomía”, añade.
Las claves
Más teléfonos. El 016 tiene cobertura en todo el Estado, y es accesible por WhatsApp en el 600 000 016. Atiende en 53 idiomas. Asesoramiento z Los Servicios Sociales de la Llitera asignan un profesional de referencia y acompañan a la víctima al juicio rápido.
Transporte. Los Servicios Sociales se encargan de la gestión del taxi para que la víctima pueda desplazarse a la vista, que según de que municipio se trate tiene lugar en Fraga o en Monzón, cabecera de los dos partidos judiciales de la comarca. El coste del desplazamiento lo paga el IAM.
Recursos. Trabajadores sociales y psicólogos realizan el acompañamiento para empoderar a la víctima. La comarca tiene acceso a una casa de emergencia con capacidad para una mujer y cuatro menores y a la red de casas de acogida provinciales.