SEGRE

De restaurante a museo: cierra L’Era del Marxant tras más de tres décadas

La familia Montané-Perucho  lo convierte en un espacio dedicado a la historia de la vida rural. Expone objetos como una silla de montar para dama, aperos de labranza, pinturas románicas o antiguos pergaminos

Josep Montané, mostrando la silla de montar para dama en una de las salas de L’Era del Marxant. - JORDI ECHEVARRIA

Josep Montané, mostrando la silla de montar para dama en una de las salas de L’Era del Marxant. - JORDI ECHEVARRIA

Marc Codinas
Publicado por

Creado:

Actualizado:

Tras más de tres décadas al frente del restaurante L’Era del Marxant, la familia Montané-Perucho ha cerrado los fogones, pero no las puertas de la que fue su casa familiar. Vecinos de toda la vida de La Pobleta de Bellveí, en la Vall Fosca, han transformado el antiguo comedor del establecimiento en un pequeño museo dedicado a la vida rural. “Sería una pena que todo aquello que había servido a nuestros abuelos desapareciera”, comenta Josep Montané.

El restaurante, ubicado en una casa construida hace más de dos siglos, fue inaugurado en 1993, después de que la familia Montané restaurara la que había sido su vivienda familiar, conocida como Cal Marxant. El nombre del local alude a la era, el espacio que antiguamente se usaba para trillar el cereal, guardar el grano o trabajar con los animales. En el caso de los Montané, la era familiar, documentada ya en 1830, fue durante décadas un símbolo de la vida agrícola del pueblo. 

Decidió convertirla en restaurante cuando, tras dos años de experiencia en hostelería, apostó por crear un lugar que combinara historia, gastronomía y entorno. Con el tiempo, la casa se amplió con apartoteles, que aún siguen abiertos. A pesar de que el restaurante ya no funciona, el legado culinario de L’Era sigue más vivo que nunca. Su hijo, cocinero profesional, elabora embutidos tradicionales en la cocina del restaurante, ahora convertida en obrador. Allí prepara productos como el xolís, la secallona o la girella, que vende directamente al público. Durante toda su vida, Montané fue guardando herramientas, utensilios y aperos que hoy conforman una exposición singular. “Pura historia pallaresa”, recalca.

Pintures d’art romànic exposades al menjador. - JORDI ECHEVARRIA

Pintures d’art romànic exposades al menjador. - JORDI ECHEVARRIA

Expone en el lugar aperos de labranza, medidores de grano, moldes para queso o una parrilla con motivos florales utilizada para tostar coca. A su lado, hay también un calientaplanchas de hierro, maletas de piel y una de las piezas más singulares, que no pasa desapercibida: una silla de montar para dama que usaban las novias cuando se desplazaban a caballo de hace más de dos siglos. Entre los objetos más antiguos destacan dos pergaminos del siglo XVI —uno de 1528 y otro de 1525—. Uno es una escritura hecha por un notario, mientras que el otro está redactado en latín y actualmente se está traduciendo. Se exhiben pinturas realizadas con temple al huevo, una técnica tradicional inspirada en el arte románico pirenaico. También conserva el sello original con las siglas MP (Marxant-Pobleta), que se utilizaba para marcar las vacas y las yeguas del ganado familiar; un bordado sobre papel de 1840 elaborado por una tatarabuela, y un pequeño tubo metálico, el “canuto”, donde antiguamente se guardaban los documentos y el dinero de mayor valor. De ahí, señala Montané sonriendo, “viene aquella expresión que aún decimos: salut y força al canut”.

El recorrido revela objetos peculiares como una navaja de afeitar de unos doscientos años que “aún corta”, bisturís con fundas de cuero usados para sangrar personas y animales, y utensilios de montaña como raquetas de nieve, polainas o crampones, muchos de los cuales pertenecían a los trabajadores de Fecsa que construyeron las centrales hidroeléctricas del Pirineo durante el siglo XX. “Cada objeto tiene su historia y juntas explican cómo se vivía aquí”, resume el anfitrión. El espacio podrá visitarse los fines de semana y festivos, bajo reserva previa, con el objetivo de mantener viva una parte esencial del patrimonio pallarés.

Titulars del dia

* camp requerit
Subscriu-te a la newsletter de SEGRE
tracking