Invasión de campo en el EF Tàrrega-Rubí de cadetes

El partido disputado el sábado entre la Escola de Futbol Tàrrega y el Rubí, de la categoría Preferente cadete, acabó con invasión de campo y el árbitro puso en el acta que dos personas se habían dirigido a él con la intención de agredirle, destacando el colegiado que la intervención del delegado del equipo tarraguense impidió que el incidente fuera a mayores.

El partido, que finalizó con victoria visitante por 1-2, se caldeó en su recta final, ya que ambos equipos se juegan la permanencia en la categoría y con este triunfo el Rubí adelanta en la clasificación a la EF Tàrrega. Los ánimos se encendieron al marcar los visitantes el 1-2, ya que los aficionados locales entendieron que el gol venía precedido de un fuera de juego que el árbitro no apreció. Antes de acabar el partido se produjo alguna tangana entre los jugadores y cuando el colegiado Zúcar González lo dio por finalizado se produjo la mencionada invasión de campo. Durante la misma, según la versión del acta arbitral, se dirigieron al colegiado dos personas en actitud violenta. Se da la circunstancia de que una de estas personas es jugador del primer equipo del Tàrrega y entrenador del cadete B, Edgar Gallart.

En cambio, el árbitro destacó la mediación en el incidente del delegado, Albert Bañuelos, que también es jugador del primer equipo. Edgar Gallart no jugó ayer el partido ante el Solsona, que el Tàrrega perdió 4-2, ya que estaba muy afectado. Miembros del club aseguraron que ayudaron en todo momento a que se impusiera la calma y que el jugador les transmitió que su intención no era la que interpretó el árbitro, sino todo lo contrario. La EF Tàrrega presentará alegaciones.