Bernal asalta el liderato

El colombiano Egan Bernal es el nuevo líder del Tour después de la etapa 19, que debía disputarse ayer entre Saint-Jean-de-Maurienne y Tignes, pero que fue neutralizada a 30 kilómetros de la meta debido a una tormenta de granizo que provocó un alud sobre la carretera, dejándola impracticable.La organización decidió dar por finalizada la antepenúltima etapa en el Iseran, que Bernal coronó en primer lugar con 2:07 sobre el francés Julian Alaphilippe, al que arrebató el liderato.

Fue una etapa de sobresaltos. El primero, el abandono de Thibaut Pinot, gran esperanza francesa junto a Alaphilippe, debido a unas molestias musculares que le obligaron a poner el pie en tierra entre lágrimas. A la conmoción de la retirada de Pinot, le sucedió una escapada de 26 ciclistas con Urán, Nibali y Alejandro Valverde. El ritmo del Ineos acabó con la fuga, hizo la selección entre los favoritos, en los que ya había cedido Quintana y poco después Alaphilippe, quien no pudo resistir la ofensiva de Geraint Thomas.

Alaphilippe perdía más de dos minutos respecto a Bernal cuando alcanzó la cima del Col d’Iseran

El británico dinamitó la etapa y el remate fue para Bernal, empeñado en recuperar la historia que labraron sus compatriotas y en ir un paso más allá para convertirse el primer colombiano en ganar en París. A 2.700 metros de altura, cuando el oxígeno falta, el corazón y las piernas de Bernal fueron mucho más rápido que los de ninguno de sus rivales: su compañero Thomas, Kruijswijk y Landa, que enlazó con los perseguidores poco antes del Iseran.

En la cumbre, Bernal tenía ya el trabajo hecho, aventajaba en un minuto al grupo de Thomas y el resto de favoritos, y un hundido Alaphilippe perdía algo más de 2 minutos y, con ello, el preciado maillot amarillo que ha defendido contra pronóstico. El descenso hacia la última ascensión en Tignes no frenó a Bernal. Pero sí lo hizo un alud de tierra y la intensa granizada que llevaron al Tour a detener la etapa antes del túnel del Val d’Isere, donde las máquinas no daban abasto para retirar barro y granizo. El director se acercó a Bernal y Simon Yates, que le había alcanzado en la bajada, para dar por terminada la jornada. El ciclista colombiano se mostró frustrado porque su gesta se quedó a medias debido al temporal, pero ya se había enfundado el maillot amarillo.

Hoy se disputa la vigésima y penúltima etapa entre Albertville y Val Thorens (130 kilómetros), con el Cormet de Roselend (primera categoría), la Cote de Longefoy (segunda) y Val Thorens (especial), 33,4 kilómetros al 5,5 por ciento de desnivel positivo y el escenario de la batalla final entre Egan y Thomas frente a Alaphilippe.