AUTOMOVILISMO
Mari Boya roza el subcampeonato de Fórmula 3 después de un brillante segundo lugar en el GP de Hungría
Mari Boya sube al podio en Hungría y se pone segundo en la general a falta de una prueba. El aranés se mantuvo a la estela de Rafael Camara, que ganó y se proclamó campeón de la categoría

Mari Boya levanta el trofeo como segundo clasificado. - EFE
El aranés Mari Boya (Campos Racing) dio ayer un paso de gigante para proclamarse subcampeón del mundo de Fórmula 3, tras firmar ayer una meritoria segunda posición en la carrera larga del GP de Hungría, manteniendo su posición en la parrilla de salida para auparse desde la cuarta hasta la segunda posición de la general antes de la última cita del curso en Italia, que se disputará en septiembre. El piloto de Les de la academia de Aston Martin suma ahora 108 puntos, tras los cuatro que ganó en el esprint del sábado y otro adicional por hacer ayer la vuelta rápida, dos por delante de su compañero de equipo Nikola Tsolov (106), que hizo una gran remontada desde el puesto 21 hasta la sexta plaza, y con 15 más que Tim Tramnitz (MP Motorsport), que queda lejos tras no puntuar en todo el fin de semana (93).
La lucha por el subcampeonato, que otorga más puntos para la Superlicencia de la FIA para poder conducir un Fórmula 1, será el principal aliciente de la última prueba, porque el brasileño Rafael Camara (Trident) mantuvo a raya a Boya durante toda la carrera partiendo desde la ‘pole’ y, con su victoria, se proclamó matemáticamente campeón de la categoría.
La lluvia apareció por la mañana en el circuito de Hungaroring, lo que provocó que la carrera se disputara con la pista mojada pese a que había dejado de llover antes de empezar la prueba. La lucha por la victoria se convirtió en un mano a mano entre Boya y Camara, pero los intentos de adelantamiento del aranés se vieron frustrados por la aparición de dos coches de seguridad, que evitaron sus ataques cuando más cerca estaba de su rival. Tras la última relanzada, Boya no pudo atacar a Camara pese a mantenerse siempre cerca hasta que la prueba finalizó por alcanzar su límite de tiempo.
Lando Norris gana la batalla estratégica entre los McLaren
El británico Lando Norris (McLaren) conquistó ayer la victoria en el GP de Hungría, decimocuarta cita del Mundial de Fórmula 1, por delante de su compañero Oscar Piastri (McLaren), que conserva el liderato en el parón estival, en una carrera en la que estrategia marcó la diferencia entre los coches ‘papaya’.
Norris, que improvisó un plan a una única parada después de que el oceánico visitase por primera vez los ‘boxes’ y evidenciase que iba a dos, se aupó al liderato de la prueba y aguantó los intentos de adelantamiento en los últimos giros de su compañero de garaje, que tuvo que conformarse con la segunda plaza para cerrar un nuevo doblete de McLaren. El británico George Russell (Mercedes) completó el podio, tras ganarle la partida en el tramo final a Charles Leclerc (Ferrari), que salía desde la ‘pole’, lideró hasta la primera parada en ‘boxes’ pero se desvaneció al final.
Todo en una buena cita para Fernando Alonso (Aston Martin), que defendió su quinto puesto en la parrilla ejecutando la misma estrategia que Norris, a una única parada, mientras que el su compañero Lance Stroll fue séptimo. Carlos Sainz, en cambio, no pudo pasar del decimocuarto lugar.
A pesar de todo, Piastri se marchará al parón veraniego, que durará hasta el 31 de agosto, en lo más alto de la general del Mundial de Pilotos, aunque ahora solo atesora nueve puntos sobre Norris, que firmó su tercera victoria en las últimas cuatro carreras.