Un hotel de Lleida ultima un acuerdo con el futbolista Keita Baldé para acoger a 40 'sin techo'

El hotel Ibis prevé acoger en las próximas horas a 40 ‘sin techo’ que pernoctan al raso en el Barri Antic. Desde la dirección de hotel explicaron ayer que han ofrecido a la Federación de Hostelería y a la Paeria 20 habitaciones dobles tras el ofrecimiento del futbolista catalán de origen senegalés Keita Baldé, a través de la Plataforma Fruita amb Justícia Social, de financiar el alojamiento a unas 200 personas, que duermen entre las calles del Barri Antic y el albergue habilitado en el pabellón 3 de la Fira. “Estamos trabajando con el abogado de Baldé para elaborar un convenio sobre el alojamiento en el hotel Ibis”, aseguró la teniente de alcalde de Políticas de Derechos de las Personas y Relación con la Comunidad, Sandra Castro, que anunció que “también ha ofertado plazas otro hotel con quien estamos en conversaciones”, aunque no precisó cuál es.

Por su parte, la activista Nogay Ndiaye afirmó que han aceptado la oferta del hotel Ibis, pero lamentó que los establecimientos solo hayan ofrecido 40 plazas “cuando hay centenares en la ciudad”. Aun así, confió en que al menos 40 de las personas sin techo que han venido a trabajar en la campaña de la fruta puedan entrar en el Ibis “lo más pronto posible”. Por su parte, el hotel espera recibir una respuesta hoy mismo.

Los vecinos desconocen qué edificio ha alquilado el futbolista y piden control sanitario a los que vengan

Por otro lado, Ndiaye rechazó aclarar cuál es el bloque que Baldé ha alquilado en la Mariola y, para los vecinos del barrio, “es un misterio”. Algunos de ellos lamentaron la situación de estas personas y culparon a las administraciones, “que son quienes tienen que encargarse de ellos”. Asimismo, se mostraron dispuestos a que el barrio acoja a 60 personas, que son las que cabrían en el edificio alquilado, pero pidieron que se cumplan “todas las medidas sanitarias posibles, ya que hay familias que tienen miedo por el coronavirus”.

Respecto a la situación en el Barri Antic, el portavoz de la plataforma del Pla de l’Aigua y miembro de Som Veïns, Josep Maria Muñoz, explicó que “todo sigue igual” y que ayer durmieron al raso, entre los porches del Centro Cívico de l’Ereta y la Casa de Fusta, unas 50 personas. Muñoz detalló que algunos días voluntarios “vienen a cocinar en medio de la calle para estas personas, pero desconocemos si tienen autorización y registro sanitario para ello, ya que si alguno sufre una intoxicación alguien deberá asumir responsabilidades”. Añadió que usan el antiguo Casal de Joves “para guardar cosas”.