POLÉMICA
El PP califica de “pirómana” a la directora general de Protección Civil
El ministro Puente replica y llama “sátrapas” a los populares. El Ejecutivo defiende su gestión, que “ha estado a la altura”, ante las críticas de las autonomías

Gran impacto de los incendios en zonas apícolas, como muestra el alcalde de A Gudiña. - EUROPA PRESS
El enfrentamiento político volvió a escalar de tono por la gestión de los incendios, después de que el vicesecretario de Coordinación Autonómica del PP, Elías Bendodo, calificase ayer de “pirómana” a la directora general de Protección Civil, Virginia Barcones, por sus palabras al insinuar que algunos gobiernos autonómicos han sobreactuado para atacar al Gobierno. Según Bendodo, el Ejecutivo “debería ofrecer medios antes de que lo pidan los gobiernos autonómicos”, que han agotado todos sus recursos y luego han acudido al Gobierno central. Barcones insistió en que “no es cierto” que las ayudas solicitadas al Gobierno para sofocar los incendios hayan llegado tarde y ni que se hubiera “escatimado ningún tiempo de recurso”. Remarcó, además, que “cada uno tendrá que responder de su gestión”.
Como defensa a la directora de Protección Civil, el ministro de Transportes, Óscar Puente, criticó que el PP tenga “la lengua larguísima” y “la piel muy fina”. “Poco les pasa a estos sátrapas”, declaró, mientras que el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, subrayó que la “deriva” del PP “hacia el insulto permanente al adversario político demuestra su desesperación y su catadura moral”. La ministra de Ciencia, Diana Morant, destacó el “compromiso incuestionable” de Barcones con la lucha contra los incendios, a la que calificó como una “servidora pública ejemplar que trabaja cada día por la seguridad de la ciudadanía”.
Varios presidentes autonómicos populares volvieron a cargar contra la gestión del Gobierno sobre el apoyo a las autonomías frente al fuego. La presidenta de Extremadura, María Guardiola, señaló que “pasaron 48 horas o más” desde que la Junta pidió más ayudas al Ejecutivo para afrontar los incendios y hasta que recibió información al respecto.
Por su parte, el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, tildó de “disparate” las acusaciones del ministerio de Interior de una solicitud “tardía” de ayuda. Rueda, que se mostró “optimista” con la evolución de los incendios, aseguró que el Gobierno intenta “despistar y ocultar la cuestión principal”, y que “si un país arde por varios sitios, algo tendrán que decir”, después de acusar a varios ministros de criticar “desde las redes sociales y sin dejar de estar de vacaciones”. Ayer centenares de gallegos se manifestaron en 26 localidades contra la gestión La Xunta, que también recibió las críticas de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que observó “errores de coordinación” en relación con la gestión de los bomberos urbanos, y que defendió que el Ejecutivo central “ha estado a la altura”.
Mientras, el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, afirmó que el PP recurre a dirigentes como Antonio Sanz –que acusó al Gobierno de cometer “negligencias”– para “tapar el margen de mejora que tienen en la gestión los gobiernos autónomicos” y “generar desafección hacia las instituciones”. Marlaska también recordó que “existe suficiente normativa estatal en la prevención de incendios” y señaló a las autonomías por la “gestión de emergencias”. Además, aceptó la citación del PP para dar explicaciones en el Senado porque “es una obligación y un deber”.
Paralelamente, el PSOE de Castilla y León criticó la “soberbia” y la “falta de autocrítica” del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, al que pidió que “dé la cara y asuma sus responsabilidades”. Mañueco defendió su gestión después de que el lunes 1.500 personas se manifestaran en Valladolid para pedir su dimisión.
Más de 400.000 hectáreas quemadas y 40 detenidos
El sistema europeo Copernicus estimó ayer en 403.171 la cifra de hectáreas quemadas en España este año, la mayoría en este mes de agosto. Según datos del ministerio del Interior, ayer había 18 grandes incendios en todo el territorio, la mayoría en Castilla y León, Galicia y Extremadura, y unos 33.000 desalojados, aunque la evolución es favorable. Sin embargo, preocupan los ya 40 detenidos y 119 investigados por provocar incendios forestales.
En Galicia se mantienen 6 fuegos activos, que han arrasado más de 82.600 hectáreas, aunque no se registraron nuevos confinamientos ni desalojos. El fuego más extenso es el de Larouco (Ourense), que ya supera las 30.000 hectáreas afectadas. Por su parte, el bombero y los dos brigadistas heridos por quemaduras están “estables” pero siguen en estado grave.
Mientras, las autoridades leonesas sospechan de la intencionalidad de un nuevo foco Fasgar (León) durante las tareas de extinción de los bomberos. Por el momento, unas 2.500 personas continúan desalojadas en 59 localidades de Castilla y León.
En Extremadura, medios aéreos sobrevolaron la zona afectada del incendio de Jarilla para detectar posibles reactivaciones. Ayer solo quedaban “dos kilómetros” para consolidar el fuego.