De Penelles al cielo

En poco tiempo, Penelles (400 habitantes) ha recibido una más que notable promoción televisiva al haber protagonizado un programa de El Foraster y ahora otro del Volando Voy, la serie de Cuatro que presenta Jesús Calleja, que ha dejado por un tiempo sus aventuras extreme por otras más rurales y entrañables. Fue el suyo un programa entrañable. Por un lado, la recuperación, gracias a su iniciativa y al esfuerzo vecinal, del cine Kursaal, hasta ahora cerrado y en estado de degradación total, y también por el homenaje que se rindió a Joan Mata, el Tato, a quién Quim Masferrer lanzó al estrellato con su mural, y que Calleja, a rebufo, lo ratificó, tras su fallecimiento a los 88 años, poco después de hacerle una antológica entrevista y también un memorable paseo en helicóptero. Fue un programa redondo, pese a su déjà vu, donde estuvo de más la presencia de Marc Márquez (el espacio no necesitaba ese refuerzo) y donde nació otra estrella más, Teresina, de 91 años, confesando que se casó a la fuerza con su marido, aunque luego le amó con locura hasta enviudar.