Presupuestos sin apoyos

Por primera vez en bastantes ejercicios, el acuerdo sobre presupuestos del Estado que se conoció la pasada semana apuesta por revertir los recortes que se aplicaron en España durante los gobiernos del PP y así contempla un incremento del salario mínimo interprofesional hasta los 900 euros, un 22 por ciento más que el actual, ampliación del permiso de paternidad y de los bonos sociales para el consumo eléctrico y de gas, medidas contra la economía sumergida e incremento del impuesto sobre el patrimonio para las grandes fortunas. También tiene buena pinta para las finanzas catalanas porque contempla 3.200 millones más para Catalunya destinados a la sanidad, la enseñanza, la asistencia social y a los Mossos d’Esquadra, además del compromiso de desatascar las inversiones en infraestructuras contempladas en la disposición adicional del Estatut, que el PP incumplió y que contemplan una inversión del Estado en Catalunya equiparada al porcentaje de su producto interior bruto con respecto al conjunto estatal. Pero este acuerdo presupuestario está supeditado a la autorización de Bruselas y su aceptación de que el déficit no solo no se reduce, sino que se incrementa en cinco décimas, algo que puede ser negociado sin alterar lo fundamental del proyecto, pero también a que cuente con la mayoría necesaria en el Congreso, y esto sí que puede resultar un escollo para el gobierno de Sánchez, porque el PDeCAT y ERC, cuyos votos son decisivos, ponen como condición la retirada de las acusaciones contra los políticos presos. La respuesta del gobierno de Sánchez no se ha hecho esperar y hasta tres ministras insistieron ayer en el argumentario oficial de la separación de poderes y de que el ejecutivo no puede interferir en la actuación del poder judicial, ni tampoco en las calificaciones de la fiscalía. Como los independentistas insisten en que no contemplan otro escenario que no sea la absolución de los imputados, sin entrar a valorar el contenido del proyecto, el acuerdo se antoja más que difícil y de momento, ayer, en la comisión bilateral que se reunía por primera vez en once años, no llegaron a acuerdos concretos. Si no se rompe este nudo gordiano, es evidente que no saldrán adelante estos presupuestos que mejoran la situación actual porque el PP y Ciudadanos ya han asegurado que no los apoyarán y si no hay presupuestos, lo previsible es que tengamos elecciones anticipadas con resultados inciertos.