CERTÁMENES
Fondarella recupera sus raíces
Celebra la Mostra d’Oficis i Artesania, que llega a la mayoría de edad. Caliqueños y ‘orelletes’, atractivos en una muestra con oficios antiguos

Un esquilador trasquilando una oveja ante la atenta mirada del público. - J.GÓMEZ
El municipio de Fondarella se sumergió ayer en la historia viva del territorio con la celebración de la Mostra d’Oficis i Artesania, un evento que se ha consolidado como referente de la memoria histórica y la cultura popular de la comarca.
Durante toda la jornada, que celebró su decimoctava edición, los visitantes pudieron recorrer las calles del municipio transformadas en un auténtico viaje al pasado, donde se representaron una treintena de oficios antiguos que formaban parte del día a día de la vida rural. Entre ellos, se pudo ver demostraciones en directo de cabassaires, tejedoras, joyeros, espardenyers o picapedreros, tal y como detalló el alcalde, Xavier Acosta. No faltaron dos productos estrella en este municipio de la comarca del Pla d’Urgell: los caliqueños y las orelletes, que varios vecinos elaboraron in situ en pleno casco antiguo. El público los pudo comprar en una parada habilitada por el ayuntamiento de este municipio del Pla d’Urgell. Para poder atender la demanda, los vecinos empezaron a elaborar estos productos a principios de la semana pasada. También se pudo adquirir la ratafía. Asimismo hubo paradas de diferentes productos de proximidad, como pan o jabones artesanos.
El público familiar fue el gran protagonista en esta edición, disfrutando de una amplia oferta de actividades culturales, gastronómicas y de ocio.
No faltaron los talleres participativos de cerámica y madera, creación de colgantes o reciclaje creativo, pensados para acercar a pequeños y mayores a las tradiciones, en especial de las zonas rurales, de una forma lúdica y educativa.