HISTORIA
Els Firals de Bellvís rompe expectativas
El ayuntamiento destaca que se ha doblado el número de asistentes respecto el año pasado. La fiesta terminó ayer con el juicio popular para defender a Joan y Maria del capitàn Rodrigo

La representación de la leyenda de Cal Bufalà fue el acto más esperado de la fiesta. - AMADO FORROLLA
Bellvís cerró ayer por todo lo alto una nueva edición de Els Firals en la que se han superado las expectativas de público. Así lo aseguró la alcaldesa, Sílvia Escalé, que destacó que “este año ha sido un éxito absoluto, hemos doblado el público que vino el año pasado y diría que se ha superado el millar de personas, estamos muy contentos y hasta los paradistas se han sorprendido”. En este sentido, Escalé destacó que el aumento de visitantes a Els Firals provocó que se agotaran los bocadillos y mojitos que ofrecían el sábado y los 400 tickets de la chocolatada popular que celebraron ayer por la mañana. “Imaginamos que el buen tiempo y que no ha hecho mucho calor ha contribuido a que viniera tanta gente, porque ni nosotros nos lo esperábamos”, añadió la alcaldesa.
El certamen tiene como objetivo recordar la leyenda de Cal Bufalà, la historia de cómo el pueblo de Bellvís y la familia Bufalà defendieron a una pareja de jóvenes, Joan y Maria, del capitán Rodrigo, que los perseguía injustamente. Una leyenda que se encargan de representar en Els Firals los vecinos del pueblo y que terminó ayer con la celebración del juicio popular en el que el pueblo logra demostrar la inocencia de los jóvenes y expulsar al capitán Rodrigo. Precisamente, la jornada de ayer acabó con la celebración del juicio y con un baile de gigantes y malabares de fuego. Antes, también hubo una chocolatada popular, una misa cantada en canto gregoriano por la Coral Espiga d’Or a la que asistieron “los nobles” para explicar parte de la leyenda, y bailes y acrobacias para celebrar el bautizo de los niños de la casa Bufalà. Por la tarde hubo juegos infantiles y teatro de marionetas y un recital de textos y poesía Jam Slam, en el que se homenajeó a Francesc Fabregat, exalcalde uno de los impulsores de que los Firals sean una fiesta de referencia.